jueves, 25 de febrero de 2016

Interpretación Astro-Cabalística del Evangelio de Marcos: Trabajos de Tauro (VI)

INSTITUCION DE LA EUCARISTIA

22 Mientras comían, tomó pan, y bendiciéndolo, lo partió, se lo dio y dijo: Tomad, este es mi cuerpo. 23 Tomando el cáliz, después de dar gracias, se lo entregó, y bebieron de él todos. 24 Y les dijo: Esta es mi sangre de la alianza, que es derramada por muchos. 25 En verdad os digo que ya no beberé del fruto de la vid hasta aquel día en que lo beba nuevo en el reino de Dios.

En la medida en que los Trabajos se aproximan a su culminación, cada momento supera en belleza al anterior. Si tensa y emotiva fue la escena en la que se produce la revelación de la tendencia "traidora", no menos emocionante y hermosa, es la hora en la que se produce el verdadero Trabajo del signo Tauro: la Comunión de los Santos; la Comunión con el Hijo del hombre, la Comunión con Dios; la Comunión con el Yo profundo y verdadero.

“Mientras comían”, es decir, mientras el alma se encuentra en el proceso de asimilar, de incorporar en la consciencia el nuevo alimento para crecer en él y con él, el Maestro toma el pan, ese manjar que hemos elaborado con nuestros esfuerzos. Es el fruto de nuestra siembra; lo hemos cuidado, lo hemos cosechado, y ahora, forma parte de nuestra mesa, dispuesto para ser incorporado por nuestra consciencia. Ese pan en manos del Maestro es el Pan de Vida, y Él nos lo ofrece como el verdadero alimento espiritual, como el Cuerpo de Cristo, es decir, como Obra de Amor.

Debemos entender, con este símbolo ritual que a partir de aquella tarde Pascual se ha repetido una y otra vez en las iglesias católicas al celebrar la Eucaristía, que nuestra mayor dicha se encuentra en convertirnos en pan para los demás, pues de este modo podremos incorporarnos a ellos formando parte de su ser. Convertirnos en pan, significa darnos en semilla; penetrar en la tierra humana de nuestros hermanos; crecer en ellos, y permitir que nos convirtamos en abundante y fértil cosecha, la cual será recogida por ellos, y utilizada para saciar su apetito. Ser pan, significa, actuar con amor y servicio.

“Tomando el cáliz bebieron todos de él”. Podemos -si queremos- ver en ese cáliz, una copa donde servir el vino, sin embargo, existe otro cáliz mucho más trascendente y al cual hace alusión Cristo; este es el cáliz del corazón, donde podemos encontrar el líquido destilado por nuestro amor. El corazón es esa copa que lentamente se va llenando de sangre y que cuando se llena, se deja rebosar para que esta llegue hasta los más recónditos rincones de nuestro ser.

A esa fuente que no deja de emanar vida, es a donde debemos dirigirnos para saciar nuestra sed. Ese corazón, el de Cristo, derramará su sangre para que llegue hasta todos y cada uno de las criaturas de la Tierra. Su corazón es tan grande, tan inmenso, que tan sólo Él, que todo lo ha amado, puede hacer que la "sangre" purificadora llegue hasta todos nosotros.

En la medida en que nuestro amor se expande cada vez más, nuestro corazón físico se agranda igualmente, y llegará el día en que notaremos, como en cada sentimiento se manifestará con más poder, y los latidos del centro cardiaco se agudizarán.

Cuando nuestros sentimientos nos hayan llevado a celebrar la sagrada Eucaristía, no de un modo ritual, superficial, sino como un encuentro con Dios, entonces, experimentaremos un proceso de elevación espiritual que nos llevará a tener la impresión de que nos hemos liberado de unas pesadas cadenas.

Ya no tendremos más necesidad de beber el fruto de la vid, el fruto del amor, a niveles físicos, pues la próxima vez lo haremos en el reino de Dios, es decir, nos liberamos de la rueda de encarnaciones, no tendremos que experimentar nuevamente más vivencias a niveles físicos. A partir de ese momento, el amor será expresado y recibido en el Reino de Dios, en el Mundo de Creación.

Jesús-Cristo se liberaba, de este modo, de los Trabajos dirigidos al Cuerpo Emocional, y que se han ido desarrollando en los signos fijos: Leo, Escorpio, Acuario y Tauro. Una vez con la consciencia en otro Plano, en el Astral, el fruto de la vid, el liquido Elemento, el amor, será bebido e incorporado en el Mundo Emocional, en el Reino de Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario